sábado, 27 de mayo de 2017

MARCO TEÓRICO


Mauricio Cevallos, {Mauricio Cevallos} (2012, Julio 19). Contaminación visual en Ibarra, El documental. 



La concepción de hombre en el ámbito organizacional, en la que se basa la filosofía organizacional sobre el llamado talento humano, se encuentra atravesada por las relaciones de poder asimétricas, generalizadas en nuestras organizaciones y sobre las cuales Carrillo (1999) hace una interesante reflexión, señalando cómo dichas relaciones “pueden llegar a adquirir manifestaciones disfuncionales y riesgosas para el bienestar de sus integrantes y el de la sociedad misma”. Ahora bien, Chiavenato (2002), expone que el desempeño es la eficacia del personal que trabaja dentro de las organizaciones la cual es necesaria para permitirle funcionar al individuo con una gran labor y satisfacción laboral.
El concepto de cultura organizacional es definido, según  Schein (1983) pp.13- 28  que  se refiere  a las persuasiones  y creencias  básicas que comporten  los miembros de la empresa. Por consiguiente, los colaboradores  de la organización determinan en gran parte su cultura y, en este sentido, el clima organizacional ejerce una influencia directa, porque las percepciones de los individuos determinan sustancialmente las creencias, mitos, conductas y valores que conforman la cultura de la organización.
De acuerdo al autor Chiavenato, Idalberto (2009), define la gestión del talento humano como “el conjunto de políticas y prácticas necesarias para dirigir los aspectos de los cargos gerenciales relacionados con las personas o recursos, incluido reclutamiento, selección, capacitación, recompensas y evaluación de desempeño”; La gestión del talento humano es un área muy sensible a la mentalidad que predomina en las organizaciones. Es contingente y situacional, pues depende de aspectos como la cultura de cada organización, la estructura organizacional adoptada, las características del contexto ambiental, el negocio de la organización, la tecnología utilizada, los procesos internos y otra infinidad de variables importantes. Por tanto, la gestión del talento humano en las organizaciones es la función que permite la colaboración eficaz de las personas (empleados, funcionarios, recursos humanos o cualquier denominación utilizada) para alcanzar los objetivos organizacionales e individuales.
De lo anterior se afirma que el área de recursos humanos es una herramienta eficaz para el crecimiento continuo de las organizaciones, permitiendo la formación de colaboradores más competitivos y humanos. Por consiguiente  se puede afirmar que el área de recursos humanos, ante un mundo globalizado ha tomado mucha relevancia, dado a que las organizaciones cada vez son más competitivas y requieren contar con el mejor personal que les permita un posicionamiento en el mercado. Para ello el área de recursos humanos debe seleccionar a los colaboradores que harán parte de la organización y con ello estrategias dirigidas al personal ingresado.
También resulta oportuno  mencionar al Clima Organizacional, hace referencia  a la percepción que tienen los colaboradores de la organización, en cuanto a la misión y visión  de la misma, así mismo las relaciones interpersonales, donde las actitudes, las opiniones y las emociones juegan un papel importante. Para  Zapata (2002) lo explica como partes dependientes entre sí que aportan al desarrollo y cambio organizacional.  No obstante  para   los autores Forehand y Gilmer,  el clima organizacional es un conjunto de características  que permiten una descripción holística y que influyen en la percepción y comportamiento de los colaboradores que conforman el Talento Humano.
 Sin embargo dentro de las organizaciones existen un sin número de factores que provocan estrés  y que se dividen en riesgos  físicos  y psicosociales, en relación con el contexto social y medio ambiental, que causan daño psicológico,  este tipo de estresores organizacionales, se relacionan  directamente con  el clima organizacional, la estructura organizacional, el territorio de la organización, las características de la tarea y las nuevas tecnologías.
De lo planteado anteriormente, los  avances tecnológicos han posibilitado el uso de plataformas y redes de comunicación  que fortalece los procesos dentro de una organización  facilitando enormemente las nuevas fuentes del saber y la mejora permanente del conocimiento, en las personas y en las organizaciones, y hacen del conocimiento el elemento más importante en la competitividad.  Por otra parte,  los cambios constantes en las organizaciones y los avances tecnológicos, exponen a los colaboradores  a diferentes eventos  estresantes, por ejemplo el uso excesivo de las computadoras  y la excesiva cargan mental,  son  generadoras de un alto nivel de estrés.  Igualmente existen factores internos y externos que afectan la calidad de vida del individuo y que son causante de estrés.  Por lo tanto, Hess (2006,2007),  plantea que la contaminación visual  puede afectar  la salud psicofísica, la conducta humana  y en consecuencia  la calidad vida, dependiendo la vulnerabilidad  de la persona. Cuando el cerebro recibe más información visual de la que puede y la  que es capaz de procesar  produce tensiones en el sistema  nervioso, con efectos en la salud. Rapoport (1974).
 No obstante, una investigación realizada, según el artículo La contaminación visual de espacios públicos en Venezuela,  evidencia que las  Cuando una imagen supera el máximo de información que el cerebro puede asimilar (4bit/seg aproximadamente), se produce estrés visual y las reacciones psicofísicas se ven alteradas, la percepción se vuelve caótica y la lectura ordenada del paisaje se hace imposible (Arbohaín y Garcén, 2001).
Para Rapoport (1974), existe un límite innato a la cantidad de información que el hombre puede manejar simultáneamente, llamada Tasa de Información Utilizable, que se define como la información que recibe y procesa una persona en un tiempo dado.   Este autor afirma que un entorno puede presentar un bajo contenido de información utilizable cuando los elementos son tan numerosos, variados y tan absolutamente desvinculados entre sí, que el sistema perceptivo queda sobrecargado, haciendo imposible obtener de él información utilizable alguna. Este tipo de señales tan intensas, provocan disgusto y aburrimiento en el receptor
 Las personas, según Rapoport (1978), actúan mejor a determinados niveles de estímulo, evitando los excesos; por eso usan filtros, a fin de reducir o “apagar” la sobre estimulación, despreciando parte del medio físico y social, aunque ello implique ciertos costos.  La adaptación a la sobre estimulación puede provocar frustración, debido a que en medios muy caóticos se pierde mucha información y energía en el proceso de percepción, resultando en un aumento de agresividad, jerarquización y territorialidad. Otros autores, como Rozadas (2006), señalan como consecuencias de la contaminación visual sobre la salud humana, dolores de cabeza, distracción, estrés, trastornos en la atención, disminución en la eficiencia laboral, mal humor, agresividad, entre otros
   En consecuencia, los impactos  visuales causan Afecciones a la salud física y mental de los usuarios. Se ha comprobado que el estrés puede desencadenar la aparición de enfermedades, anomalías y anormalidades patológicas, el desorden o exceso de información produce cansancio visual y el agotamiento puede incluso influir en la productividad económica de los afectados.
Los efectos de una contaminación visual son diversos y muy subjetivos, existen personas cuyo rendimiento no se ve muy afectado por qué tan ordenado esté su espacio inmediato, en cambio otras no pueden iniciar su trabajo hasta que su espacio esté totalmente limpio y ordenado. Pero además del rendimiento, la contaminación puede conllevar los siguientes efectos en la salud:
·        Estrés.
·        Dolor de cabeza.
·        Distracciones
·        Trastornos de atención
·        Disminución de la eficiencia laboral, mal humor, agresividad, etc.
El ojo es una máquina óptica muy compleja. La retina retiene la imagen durante 1/10 de segundo, como si fuera el cuadro de una película. De hecho, este mecanismo ha sido aprovechado para crear el efecto de movimiento en el cine. La información visual retenida en tan corto tiempo tiene una acción directa sobre nuestra capacidad de atención.